La bebida caliente conocida a nivel global, con su alta concentración de antioxidantes, es clave para prevenir enfermedades crónicas, mejorar la función cognitiva y protege la salud dental. Una infusión milenaria que cuenta con datos que muchos aún ignoran y que contribuyen a mantener una buena calidad de vida.
El té, una bebida milenaria apreciada en todo el mundo, no solo es un placer para los sentidos, sino también un aliado poderoso para la salud. Nuevas investigaciones destacan cómo los antioxidantes presentes en cada taza pueden combatir enfermedades virales y prevenir diversas enfermedades crónicas. Con un contenido antioxidante diez veces mayor que el de otros alimentos de origen vegetal, el té se posiciona como una bebida esencial para quienes buscan mejorar su bienestar.
«El té fresco tiene más beneficios para la salud que el té no tan fresco. Esto se debe principalmente a los flavonoides presentes en esta bebida. Si no se almacena correctamente, el contenido de estos compuestos disminuye con el tiempo. Un envasado adecuado después del procesamiento puede preservar estos flavonoides durante dos o tres años, asegurando que mantenga sus propiedades saludables», comentó Cristián Pastene, Dilmah Brand Representative & Tea Trainer.
Así, para demostrar que el té es más que una simple bebida, sino que una herramienta poderosa para la salud integral, incluir varias tazas de té fresco en la dieta diaria es una forma efectiva de potenciar el bienestar. Algunos beneficios desconocidos del té son:
- El poder de los antioxidantes
El té se distingue por su elevada actividad antioxidante, gracias a los flavonoides presentes en cada hoja. Los expertos señalan que beber de tres a cuatro tazas de té fresco al día puede proporcionar los beneficios necesarios para una salud óptima. Estos antioxidantes no solo ayudan a combatir enfermedades virales, sino que también pueden desempeñar un papel crucial en la prevención de enfermedades crónicas.
- Té verde v/s té negro: ¿cuál es mejor?
Aunque el té verde y el té negro provienen de la misma planta, Camellia sinensis, los métodos de procesamiento diferencian sus beneficios. Las catequinas, predominantes en el té verde, se convierten en teaflavinas y tearubiginas en el té negro. A pesar de estas diferencias, ambos tipos de té ofrecen beneficios similares debido a sus altos niveles de polifenoles, lo que sugiere que tanto el té verde como el negro pueden ser igual de beneficiosos para la salud.
- El impacto del té en la función cognitiva
Estudios recientes han investigado cómo los componentes del té, como la cafeína y la teanina, pueden mejorar la función cognitiva. Los resultados indican que estos compuestos pueden tener efectos positivos en la atención, memoria y otras habilidades mentales. Además, se ha demostrado que el té podría tener beneficios en la lucha contra la enfermedad de Alzheimer, una preocupación creciente entre las personas mayores.
- Té y salud dental
El té no solo es beneficioso para el cuerpo, sino también para la salud bucal. Sus hojas acumulan flúor, esencial para la prevención de la caries dental. Además, sus polifenoles inhiben el crecimiento de microorganismos dañinos en la cavidad oral, proporcionando una defensa adicional contra las enfermedades dentales.
- Consumo de té durante el embarazo
Para las mujeres embarazadas, la ingesta moderada de té (3-4 tazas al día) es segura y no afecta negativamente al desarrollo del feto. Aunque el metabolismo de la cafeína se ralentiza durante el embarazo, un consumo moderado no presenta riesgos significativos para la madre ni para el bebé.
- Prevención de enfermedades graves
El té también ha demostrado tener propiedades protectoras contra enfermedades graves como las cardiopatías y los accidentes cerebrovasculares. Los polifenoles antioxidantes del té son absorbidos en el torrente sanguíneo, donde actúan para reducir el riesgo de estas enfermedades degenerativas comunes.