En el marco de su Plan Nescafé 2030, la marca de café ha logrado reducir su impacto medioambiental a nivel global y en su fábrica en la comuna de Graneros, en Chile, además de fomentar prácticas de  agricultura regenerativa, capacitando a más de 148 mil caficultores en 16 países. 

Año a año NESCAFÉ ha acelerado sus esfuerzos por conseguir los objetivos de su su Plan 2030, el que marca su visión y ambición de sostenibilidad para esta década e impulsa sus esfuerzos hacia un cultivo cafetero más sostenible. Este plan es un conjunto de objetivos y compromisos que NESCAFÉ ha establecido a nivel mundial para abordar desafíos ambientales y sociales claves.
 
Debido a este programa en Chile ya se registran avances importantes. Uno de ellos es en términos de eficiencia energética, ya que en la fábrica de Nestlé en Graneros, donde se fabrica el café, el 100% de la energía proviene de fuentes renovables. Se espera que al 2025, todas las fábricas de NESCAFÉ a nivel global cumplan esta meta.
 
Además, en la fábrica ubicada en la Región de O´Higgins, es cero residuo, lo que significa una reducción de más de 883 toneladas de residuos a vertedero hasta la fecha. En esta misma lógica existen dos iniciativas que se han desarrollado con la comunidad local y que tienen que ver con la reutilización de sacos de café y el reuso de la borra. Por una parte, los sacos de café se ocupan para crear bolsos que son realizados por una artesana de la localidad, mientras que la borra de café se entrega para la creación de compost  a Agro Mostazal, quien ha recibido más de 30 toneladas de este producto orgánico.
 
“Tenemos un norte muy claro y es ser un agente real de cambio y generar un impacto en el cultivo del café a nivel global. Esto implica un apoyo permanente a los caficultores y a la agricultura regenerativa y buscar constantemente nuevas oportunidades de desarrollar tecnologías e iniciativas que potencien nuestro compromiso con la sustentabilidad”, señaló Juan Pablo Cañas, Marketing Manager de Nescafé.
 
Avances Plan 2030
 
En este camino hacia la sostenibilidad, NESCAFÉ obtuvo de manera responsable más de 700 mil toneladas de café, equivalentes al 92,5% de la producción a nivel mundial. “Esto quiere decir que nuestro café es rastreable hasta su origen y se cultiva de acuerdo a los estándares internacionales de sostenibilidad, los que son verificados por organizaciones externas”, detalla Cañas.
 
El impacto positivo de este plan se puede ver en sus cifras. Por ejemplo, 148 mil caficultores en 16 países se han capacitado en agricultura regenerativa; se han distribuido 21 millones de cafetales para renovar y reforestar, acumulando un total de 290 millones desde 2010. Esto se suma al Plan Global de Reforestación de Nestlé que ha plantado más de 3 millones de árboles para capturar carbono y fomentar la biodiversidad. 
 
“Estamos instalando la agricultura regenerativa en el corazón del Plan Nescafé 2030 y trabajamos con los agricultores para ayudarlos a adoptar prácticas de agricultura regenerativa que ayudarán a reducir la emisión de gases de invernadero y mejorar la productividad de los campos con el objetivo de mejorar los ingresos de los agricultores”, comentó Juan Pablo Cañas.