Cambiar de establecimiento educacional es una experiencia trascendental en la vida de cualquier estudiante. Esta decisión, que muchas veces implica dejar atrás amistades, rutinas y un entorno ya conocido, puede ser un momento tanto de emoción como de temor e inseguridad.
El proceso de cambio de colegio involucra no solo una adaptación académica, sino también un importante ajuste social y emocional. Para los padres, surge la pregunta de cómo apoyar a sus hijos en esta etapa sin abrumarlos. Según expertos en psicología infantil, un cambio de colegio puede despertar sentimientos de pérdida y ansiedad, pero también es una oportunidad para desarrollar resiliencia y nuevas habilidades de socialización.
Paula Reyes, psicóloga del Colegio Seminario Menor de Las Condes, comenta: “Los padres juegan un rol esencial en cómo sus hijos enfrentan los cambios. Un acompañamiento cercano y empático ayuda a los niños a enfrentar los retos con mayor seguridad, generando un espacio de confianza en el que pueden expresar sus inquietudes sin miedo”.
Además, la experta comparte cinco recomendaciones clave para hacer que este periodo de transición sea más llevadero para todos los miembros de la familia. Estos consejos buscan facilitar el proceso de adaptación y minimizar posibles tensiones, promoviendo un ambiente de apoyo y comprensión. Con estas recomendaciones, cada integrante de la familia puede sentirse acompañado y preparado para afrontar los cambios de manera positiva y saludable.
Facilita el contacto con el nuevo entorno escolar antes de empezar las clases
Una buena forma de reducir la ansiedad es realizar visitas previas al colegio. Permitir que tu hijo conozca las instalaciones, la biblioteca, el gimnasio y otros espacios, y que visualice cómo serán sus nuevos días, puede darle un primer acercamiento seguro al cambio. En algunos casos, se puede coordinar una breve reunión con el futuro profesor o algún compañero, lo cual ayudará a reducir la incertidumbre.
Fomenta una actitud positiva frente al cambio
A medida que se acerca el inicio de clases, enfócate en hablar de los aspectos positivos de la nueva experiencia: conocer a nuevos amigos, explorar nuevas actividades, o incluso el desafío de aprender materias con un enfoque distinto. Ayudarlo a ver el cambio como una oportunidad de crecimiento fortalecerá su actitud para adaptarse.
Mantén una comunicación abierta y escucha sus preocupaciones
Es natural que tu hijo tenga temores o dudas sobre el cambio, y la mejor manera de ayudarlo es creando un ambiente donde pueda expresarlos libremente. Escuchar sus sentimientos sin minimizarlos, mostrar empatía y compartir anécdotas sobre tus propias experiencias de adaptación pueden ser herramientas útiles para que se sienta comprendido y validado.
Refuerza su autoestima y habilidades sociales
El cambio de colegio es un buen momento para recordarles a tus hijos sus fortalezas y habilidades. Puedes motivarlos a participar en actividades extracurriculares que les interesen, ya que esto les permitirá hacer nuevos amigos y consolidar su sentido de pertenencia en el nuevo entorno. Alentar estas habilidades no solo los ayuda en la adaptación, sino que también fortalece su confianza.
Supervisa su adaptación a corto y mediano plazo
Una vez iniciado el año escolar, es importante hacer un seguimiento de cómo se siente tu hijo en su nuevo colegio. Mantente en contacto con los profesores y observa sus interacciones con compañeros y su actitud en casa. Esta supervisión no solo te permitirá identificar cualquier dificultad a tiempo, sino que también te ayudará a reconocer y celebrar los avances y logros que vaya alcanzando.
Acompañar a tu hijo en esta transición requiere paciencia, empatía y comunicación constante. Con el apoyo adecuado y una guía amorosa, este cambio puede transformarse en una experiencia enriquecedora y en una oportunidad para que desarrolle habilidades que le servirán toda la vida. Aunque cada niño vive el cambio de manera diferente, un entorno familiar seguro y una actitud positiva pueden hacer que esta etapa sea mucho más llevadera, preparando el camino para un nuevo capítulo de crecimiento y aprendizaje.