El consumo excesivo de azúcar tiene consecuencias graves en la salud de niños y adultos. En el marco del Mes de la Diabetes, Compass Group revela datos clave sobre hábitos alimenticios y comparte consejos prácticos para fomentar una alimentación saludable desde la infancia.

Una encuesta reciente realizada por Compass Group, compañía líder en servicios de alimentación, destacó que el 75% de los participantes considera importante moderar el consumo de dulces en los niños. Sin embargo, el 18% opina que no es necesario establecer límites estrictos, especialmente en festividades u ocasiones especiales.

Este resultado resalta la importancia de educar sobre el impacto del consumo excesivo de azúcar. Comer grandes cantidades en un corto período puede alterar los niveles de glucosa en sangre, provocando explosiones de energía, fatiga e irritabilidad. A largo plazo, el consumo habitual y excesivo de alimentos altos en azúcar está relacionado con problemas metabólicos como la resistencia a la insulina, que incrementan el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2.

Actualmente, más de 540 millones de personas viven con diabetes tipo 2, y se estima que la cifra superará los 738 millones para 2045. Este aumento, impulsado por hábitos poco saludables, afecta a personas de todas las edades, incluyendo niños. Esto refuerza la necesidad de tomar decisiones conscientes y saludables en la vida diaria.

Fomentar el equilibrio y la moderación desde la infancia es clave para establecer hábitos saludables que perduren toda la vida. Con este enfoque, Compass Group ofrece recomendaciones prácticas para equilibrar la alimentación de niños y sus familias:

  • Ofrecer alternativas atractivas: Frutas decoradas, snacks saludables o postres caseros pueden ser opciones nutritivas y divertidas para los niños.

  • Establecer horarios y porciones: Limitar el consumo de dulces a cantidades específicas y momentos definidos puede ayudar a evitar un consumo excesivo.

  • Promover actividad física regular: Juegos al aire libre y deportes son esenciales para contrarrestar el exceso calórico y mejorar el bienestar general.

  • Involucrar a la familia en la cocina: Preparar juntos recetas saludables fomenta la educación alimentaria y fortalece los lazos familiares.

El compromiso con hábitos saludables en el día a día puede prevenir enfermedades crónicas como la diabetes y mejorar la calidad de vida. Compass Group promueve estos pequeños cambios como parte de su misión de apoyar el bienestar de las familias.