Al usar productos de cuidado personal, los hombres también logran transportarse a un espacio de bienestar muy personal, así como a conectarse con ellos mismos.
Históricamente, el mundo del cuidado personal ha estado más vinculado a lo femenino, sin embargo, la marca de cosméticos británica LUSH www.lush.cl siempre ha apostado firmemente por un autocuidado inclusivo, donde no existen productos según género ni estereotipos, donde también se sienten bienvenidos los hombres. Y, si bien aún existen aquellos que se resisten a probar una mascarilla o dejarse mimar con un spa de manos en una tienda de belleza, de acuerdo a la marca el mercado está cambiando.
Ello, porque cada vez son más los que, teniendo la oportunidad en el interior de su hogar de probar algún producto, terminan disfrutándolos tanto o más que sus parejas o familiares.
Es por esta razón que, desde hace 30 años, LUSH ha buscado cambiar la historia, abriendo un espacio donde cuidarse y ser hombre, papá o hermano, van de la mano, sin clichés ni etiquetas. «el cuidado personal no es solo una rutina, es el signo de una sociedad civilizada. El acto de afeitarse y arreglarse tiene un significado que va más allá de la mera apariencia. Se trata del ritual, la experiencia y la intención que hay detrás, ya sea para un día casual o una ocasión especial”, explica en mes del padre, el director de LUSH Chile, Marko Sarras.
Y, agrega, “cuidarse también es masculino, aunque sea con productos de rutina básica básicos. Cuando adoptas una práctica de cuidado más nutritiva y consciente, descubres lo espectacular que es. Suele ser más común que las mujeres lo hagan con naturalidad, que se preparen para distintos momentos del día: para dormir, para salir, para descansar. Existe en ellas una intención constante de entregarle algo bueno al cuerpo. En los hombres es menos común”.
En este sentido, la marca ofrece productos que van más allá de la limpieza, debido a que su uso también aportan bienestar y generan un impacto positivo en el cuerpo, sin importar que sea en una ducha rápida, un baño de tina o a la hora de afeitarse. Al usar productos de cuidado personal, los hombres también logran transportarse a un espacio de bienestar muy personal así como a conectarse con ellos mismos.
“Seguiremos construyendo un espacio donde el cuidado sea una forma de amor sin etiquetas, invitar a atreverse a usar productos de cuidado, por ejemplo, crema humectante. Todas las personas necesitamos hidratarnos; la piel lo necesita, en las manos, las piernas, el cuerpo, la cara. Los invito a usar productos que permanezcan, no solo aquellos que limpian. Estamos muy acostumbrados a lo que higieniza, pero no tanto a lo que se queda y que, de paso, cuide nuestra piel», finaliza el ejecutivo.
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