En época de invierno, donde los virus y bacterias están más presentes, una alimentación rica en antioxidantes puede convertirse en una herramienta clave para reforzar nuestro sistema inmune.
«Cuando el cuerpo enfrenta una infección, se generan radicales libres, como parte de la respuesta inflamatoria propia de la infección que ayudan a eliminar al virus, pero si no se controlan, pueden dañar nuestras propias células y debilitar nuestras defensas», explica Trinidad Forteza, nutricionista de Nutrisco. Es lo que se conoce como estrés oxidativo, un desequilibrio que puede empeorar el curso de una infección.
En este escenario, los antioxidantes ayudan a neutralizar estos radicales libres, reduciendo la inflamación y protegiendo nuestras células.
Entre los más conocidos están:
- Vitamina C, presente en cítricos, berries, kiwi, brócoli y pimentón rojo. “Contribuye a reforzar la barrera epitelial, estimula la acción de células inmunes y reduce el daño en zonas inflamadas”, detalla Forteza.
- Vitamina E, presente en frutos secos, semillas y aceite de oliva extra virgen, que actúa en las membranas celulares y modula la inflamación.
- Carotenoides, como los de la zanahoria, espinaca y tomate, que el cuerpo transforma en vitamina A y que ayudan a mantener las barreras mucosas y estimular la inmunidad.
- Polifenoles y flavonoides, presentes en alimentos como los berries, la cebolla, manzana, cúrcuma, arándanos o té verde, con propiedades antioxidantes y antiinflamatorias.
Además, alimentos como legumbres y frutos secos aportan zinc y compuestos fenólicos que potencian este efecto protector.
A pesar de la importancia de estos nutrientes, los estudios muestran que en Chile el consumo de frutas y verduras está por debajo de las recomendaciones. Según la Encuesta Nacional de Salud 2016-2017, solo el 15% de la población adulta consume las 5 porciones diarias recomendadas de frutas y verduras .
“La clave está en la variedad”, concluye la nutricionista. “No hay un solo alimento que haga milagros, pero sí una estrategia efectiva: consumir vegetales de distintos colores, mantener una buena hidratación, dormir bien y movernos a diario. Todo suma cuando se trata de cuidar nuestras defensas”.
Una forma práctica y accesible es a través de productos congelados que mantienen sus propiedades intactas gracias a la tecnología IQF. Marcas como Bou y Cook Green ofrecen berries congelados, mix antioxidantes y pulpas de frutas como maracuyá, piña, mango o chirimoya además de verduras, ideales para smoothies, postres o preparaciones calientes.
